Como vimos en el anterior video, varios marinos griegos, miembros de la expedición de Magallanes, participaron en el descubrimiento y exploración de las costas de las actuales Uruguay, Argentina y Chile. Sin embargo, estos no fueron los últimos, y en los siguientes años otros griegos visitaron aquellas costas.
Tras Magallanes, una expedición encabezada por el comendador García Jofre de Loaísa que también se dirigía a las Molucas recorrió aquellos litorales entre diciembre de 1525 y mayo de 1526. En esta armada iban unos quince marinos griegos, entre ellos el buzo Jorge Griego, el maestre Nicolás de Rodas y el marinero Francisco de Paris.
Tras pasar por lugares como la “tierra de los humos” o la isla de los patos, la expedición de Loaísa, que navegaba disgregada, llegó a mediados de enero a la entrada del estrecho de Magallanes, momento en que una tormenta hundió una de las naves, como nos cuenta Francisco de Paris en su relato. En esta nave, de la que se pudo rescatar a la mayoría de los hombres, iban a bordo tres griegos, el buzo Jorge Griego, el marinero Nicolás de Nápoles y el grumete Bautista de Xio.
Días después, el resto de las naves entró en el estrecho y llegaron a la que Paris llamó bahía de la Victoria, ya en aguas de lo que hoy es Chile, donde pasaron varios días. En ese tiempo, como nos dice Paris, una tormenta dañó una de las naves y otras dos desertaron, una de ellas se perdió cuando intentaba llegar a las Molucas a través del cabo de Buena Esperanza y otra consiguió arribar a España.
Luego el resto de las naves salió del estrecho y fueron al río de Santa Cruz a efectuar reparaciones durante las siguientes semanas, volviendo a entrar en el estrecho el 8 de abril. De lo que pasó durante la travesía por el estrecho no nos habla Paris, pero otros relatos nos cuentan como pasaron por lugares como el puerto de la Concepción, el puerto de las Sardinas o el puerto de San Juan de Portalatina, hasta que alcanzaron el océano Pacífico el 26 de mayo. Tras esto Paris cuenta que las naves se separaron, una consiguió llegar a Nueva España, otra a la isla de “Sant Guin”, otra a Tidore, en las Molucas, y una, la San Lesmes, se cree que pudo llegar a Nueva Zelanda y Australia.
Años después, una expedición enviada por Hernán Cortés encontró a varios supervivientes en Tidore, entre ellos estaban tres griegos, Francisco de Paris, Juan Griego y Pablo Griego. Más tarde, Paris sería uno de los escasos supervivientes que consiguieron regresar a España, convirtiéndose así en uno de los pocos hombres en completar la segunda vuelta al mundo.
Tras esta, otras expediciones con marinos griegos entre sus tripulantes llegaron a aguas de Sudamérica. Así, en la expedición encabezada por el veneciano Sebastián Caboto sabemos que había varios griegos, aunque al parecer solo dos, el marinero Juan Griego y el carpintero Juan Cazagurri, navegaron entre 1526 y 1530 por las aguas del Río de la Plata, el Paraná y el Paraguay.
En ese tiempo otra expedición llegó al Río de la Plata y el Paraná, la encabezada por Diego García de Moguer, aunque desconocemos si algún griego iba a bordo.
En esa misma época en España el portugués Simón de Alcazaba preparaba la Armada de la Especiería que debería dirigirse a las Molucas a través del estrecho de Magallanes. Por la documentación sabemos que en esta expedición estaban enrolados tres griegos: los maestres Nicolao Griego y Marcos de Candía, y el marinero Nicolao de Rodas. Sin embargo, la expedición se suspendió en 1529 cuando España renunció a la posesión de las Molucas.
Ese mismo año Alcazaba recibió el gobierno de todos los territorios al sur del Perú, lo que se llamó la gobernación de Nueva León, por lo que comenzó a preparar una armada para explorarlos y tomar posesión de ellos. Por fin, en septiembre de 1534 la armada de Alcazaba zarpó. En esta flotilla de solo dos naves, se encontraba el piloto Nicolao Griego, quizás el mismo mencionado anteriormente. Tras una escala en las Canarias, la expedición no volvió a tomar tierra hasta llegar a las costas patagónicas en enero de 1535, concretamente lo hizo en el litoral chubutense y en río Gallegos. Luego la armada entró en el estrecho de Magallanes donde pasó un mes, aunque el mal tiempo hizo que diera la vuelta y anclara en la bahía Gil, en la moderna provincia de Chubut, donde en febrero fue fundado “Puerto de los Leones”.
A continuación, Alcazaba organizó una expedición armada que avanzó hacia el interior del territorio cerca de 100 leguas. Esta, según los relatos que se conservan, estaba guiada por un piloto que hacia uso de sus instrumentos de navegación para ello, y que según parece era Nicolao Griego, el cual se convirtió así en uno de los primeros exploradores de la Patagonia. Sea como fuere, la expedición acabó en desastre, los hombres se amotinaron y mataron a Alcazaba, consiguiendo tras muchos problemas llegar una de las naves a Santo Domingo en septiembre, siendo uno de los supervivientes el piloto Nicolao Griego.
Ese mismo año partió de España la armada de Pedro de Mendoza, el cual fundaría Buenos Aires, aunque de los cientos de hombres que componían la expedición parece que ninguno era griego.
Por último hablaremos de la expedición comercial del genovés León Pancaldo, quien con dos naves pretendió llegar desde España al Perú a través del estrecho de Magallanes, sin embargo, al perder en noviembre de 1537 una de ellas en el “río de Gallegos”, al sur de la Patagonia, la otra se dirigió a Buenos Aires, frente a donde se hundió a finales de abril de 1538. Aunque no conocemos a todos los tripulantes de esta expedición sabemos que varios eran genoveses y, teniendo en cuenta que por entonces Génova aún tenía posesiones en el Egeo, no sería descabellado pensar que hubiera griegos entre los hombres de Pancaldo.
Tras esta hubo otras expediciones a aquellas costas, como la enviada por el obispo de Plasencia o la de Juan Ladrillero, aunque desconocemos la presencia de griegos entre sus tripulantes.
Puedes encontrar más historias en nuestro canal: https://www.youtube.com/@mhistoria6088/videos
No hay comentarios:
Publicar un comentario